¿Por qué necesita mi hijo/a dos fases de ortodoncia?

En ocasiones, nos surgen casos en los cuales es necesario hacer dos fases de ortodoncia, ya que no podemos corregir los problemas en una sola fase ni en un solo momento.

Cuando hacemos las revisiones rutinarias, evaluamos el tipo de mordida que el niño tiene y cómo se va produciendo el recambio dental. Estas revisiones son muy importantes porque nos servirán para evaluar el momento preciso para tratar la patología, en caso de que la haya.

Cuando detectamos un problema a una edad temprana, lo primero que haremos, antes de tratarlo, será una fase interceptiva de corrección de hábitos. Consiste en detectar la causa de la patología, en caso de que la haya, y eliminarla. Por ejemplo: uso de chupete de manera prolongada, succión digital o deglución atípica.

Una vez eliminada la causa, pasaremos a una primera fase de tratamiento. En ella trataremos problemas esqueletales, en los cuales hay una discrepancia entre el crecimiento del maxilar y la mandíbula, que puede ser tanto en sentido horizontal como en vertical o incluso ambos. En estos casos aparecen problemas de mordidas cruzadas, mordidas abiertas, adelantamiento o retraso en el crecimiento del maxilar o la mandíbula… Esta primera fase se realiza aprovechando el crecimiento del niño, lo que quiere decir que llegado cierto momento ya no se puede realizar, de ahí la importancia de diagnosticar los problemas lo más pronto posible. Esta primera fase nos facilitará la segunda fase de alineamiento para que sea más corta y efectiva.

Una vez completada la primera fase, habremos corregido los problemas de mordida del niño, pero puede ser necesaria una segunda fase, en la que nos enfocaremos en la alineación de los dientes. Esta segunda fase se suele realizar cuando ya han erupcionado todos los dientes definitivos y el crecimiento del niño se ha completado, por lo que no sería posible corregir problemas esqueletales.

En ocasiones, el problema del niño es detectado demasiado tarde y ya no es posible realizar esa primera fase. En estos casos, lo que haríamos sería camuflar esos defectos con el movimiento dental o incluso en algunos casos será necesario la cirugía para poder corregirlo.

A veces nos encontramos que la mordida durante el crecimiento es correcta, pero cuando ya se ha completado el recambio, los dientes no se han colocado correctamente en el arco y es cuando necesitamos ortodoncia, por lo que no todos los pacientes que llevan ortodoncia necesitan pasar por una primera fase de ortopedia. En nuestra clínica dental en Valdemoro estudiamos cada caso para ofrecer la mejor opción a nuestros pacientes.

¡COMPÁRTELO!

Facebook
WhatsApp
Twitter
LinkedIn

¡COMPÁRTELO!

¡Compártelo!

También te pueden interesar…

¿Empezamos el cambio?

Déjanos tus datos y nos pondremos en contacto contigo.

Últimos post

¡Síguenos!

¿Empezamos el cambio?

Déjanos tus datos y nos pondremos en contacto contigo.

Queremos ayudarte
¿Te llamamos?

¡Deseando conocerte!

Te llamaremos en breve para fijar tu próxima visita a la clínica.

¿todavía no nos sigues?